Pasamos mucho tiempo pensando en cómo proteger nuestra ropa, con toda la razón, nos cuesta dinero y no podemos cambiarla constantemente, entonces lo mejor es cuidarla lo más que se pueda y que nos dure muchísimo. Cuando nos toca lavar nuestras prendas preferidas siempre tememos destruirlas, desteñirlas o convertirlas en trapo de piso por una mal lavada, un error en el detergente o cualquier cosa que nos convierta en una tragedia nuestra compra.
Normalmente encontramos tantos consejos, información, recomendaciones que inundan nuestra red, sin embargo creo que es más fácil recomendar justamente lo que nos ha servido siempre, es por esto que les cuento lo que a mí me ha funcionado desde que me encargo de mi ropa, antes lo hacía mami.
- Siempre fijarnos antes de lavar cualquier prenda en la etiqueta, todas las prendas llevan instrucciones de lavado, les adjunto abajo una foto con el significado de las indicaciones más importantes.
- Para camisas, blusas, vestidos o ropa interior lo mejor es usar un gancho de ropa para tender estas prendas, si usamos tenemos que usar prensas, hacerlo en las costuras para evitar que se marquen.
- Prendas tejidas, como por ejemplo abrigos de lana o similares, nunca tenderlas, lo mejor es extenderlas sobre una superficie plana en la sombra, de lo contrario se nos estirarán.
- El uso de la secadora no es para toda la ropa, nuevamente fijándonos en la etiqueta sabremos si es una prenda para este uso.
- No dejemos secar la ropa bajo el sol demasiado tiempo, esto normalmente pone súper duras las prendas, poner en la sombra la prenda al final de su secado ayudará mucho.
- El jabón siempre es importante, busquemos dentro de nuestras posibilidades jabón líquido, el jabón en polvo muchas veces mancha la ropa en el proceso del lavado, actualmente casi todas las marcas de jabones tienen la presentación liquida, en diferentes precios, muchos súper accesibles.